martes, 10 de julio de 2018

Acoso laboral


—Oye, ¿estás seguro de que vas a enviar ese email así, tal como lo estás redactando?
—Sí...
—Es que creo que la redacción es bastante mejorable.
—...
—A decir verdad, más que mejorable, me parece una porquería. Y como lo has estructurado me parece de chiste.
—...
—¿Y cobras por esto? No me creo que no haya nadie mejor en la oficina. Si hasta un mono lo hubiera hecho mejor. Dime la verdad, lo has redactado sentándote en el teclado.
—Ya está bien, ¿no?
—No... ¡NO TIENE DEDOS! ¡GUTIÉRREZ NO TIENE DEDOS! NO TIENE DEEEEDOS...
—Vale, vale. Lo siento De Gea, es verdad que en este mundial me pasé contigo, puede que fuera algo injusto con mis comentarios. No sé como te has enterado, ni cómo has dado conmigo o con dónde trabajo. Si es que ni nos conocemos, es de locos... Pero lo he pillado, me lo merezco... ¿Contento?
—¡GUTIÉRREZ NO TIENE DEEEDOOOS!

No hay comentarios:

Publicar un comentario